Por el tiempo que llevo apoyando a las mamás creo que la principal razón que nos mueve a buscar una doula es el desconocimiento, durante el embarazo, el parto y el puerperio somos muy vulnerables, dado que es la primera vez que vivimos estas situaciones y si es la segunda no sabemos hasta qué punto tenemos derecho a elegir según qué cosas.  Nos venden en el mundo que nos rodea todo va a ser maravilloso y es un momento para disfrutar al máximo, el problema llega cuando empiezas a darte cuenta de que lo que te han vendido es una gran mentira que está idealizado. Que tienes unas nauseas tremendas, que no puedes comer muchísimas cosas, que te duermes por los rincones, que no debes engordar más de un kilo por mes (cosa que no es así y estoy completamente en contra), que visitas el baño en innumerables ocasiones durante toooodo el embarazo y no sólo en la recta final y un gran etcétera de pequeñas cositas que te ocurren durante la gestación. Nosotras estamos ahí para explicarte qué es lo que te va a ocurrir durante este periodo y para advertirte de lo que puede venir después, podemos ayudarte a paliar las molestias que el ginecólogo las ve como "normales" y te dicecque lo único que tienes que hacer es aguantarte. 





Según se acerca el momento del parto llegan nuevas dudas, qué es una episotomía, cuándo se debe hacer, hasta cuándo te pueden poner la epidural, que si puedes beber durante la dilatación y ¡tropecientas cosas más! En este momento a mi me encanta llegar a preguntarle a las parejas: " bueno ¿y vosotros?  ¿cómo queréis vivir la llegada de vuestro bebito?" En ese momento se quedan petrificados y me contestan: "¿Cómo? ¿Qué podemos elegir?" . La respuesta es ¡por supuesto! Hasta cierto punto sí, por eso puedes dar a luz en un hospital u otro dependiendo de cómo quieras que sea o puedes hacer un plan de parto para que respeten vuestra decisión hasta donde se pueda, es decir, siempre que no se ponga en riesgo la salud ni de la mamá ni del bebé.




¿Y con la llegada del recién nacido? ¡Es todo felicidad! Nadie te dice que es durísimo el primer mes porque no descansas, tienes las hormonas revolucionadísimas y encima no entiendes por qué el bebé está todo el día enganchado a la teta... Ahí empiezan las grandes dudas de ¿Tendré leche suficiente? ¿Le alimentará? ¿Necesitará refuerzo? ¿Coge suficiente peso? ¿Por qué cada vez que lo dejo en la cuna llora? ¿De verdad es tan malo meterlo en nuestra cama o cogerlo en brazos? Y a todo ésto le añadimos las opiniones de la gente...Al final termina llorando la mamá y el papá desesperado. Lo ideal es saber antes cómo va ser el puerperio y no vivir en la ignorancia y pensar que el bebé sólamante come y duerme, que también llora porque no se duerme o porque quiere estar con madre, para eso es bueno que la doula con anterioridad te comente cómo van a ser esos días, las dificultades que te puedes encontrar y que luego te acompañe y escuche, te aconseje y empatice contigo. Que te diga las diferentes opciones que tienes y así poder elegir la que mejor se adapte a ti y tu futura familia. En este punto quiero dejar muy claro que yo siempre aconsejaré lactancia materna, pero si una mamá después de ser informada se decide por la artificial la apoyaré de igual manera.

En mi caso, al ser asesora de lactancia también ayudo a la mamá a solucionar los problemas que pueda tener a la hora de amamantar y a lograr que los dos disfruten de este período tan bonito como éste. Amamantar no tiene que ser doloroso y puede llegar a ser muy muy placentero pese a lo que se diga, lo importante es recibir la ayuda necesaria.