Por fin os muestro la segunda parte del post de alimentación complementaria, al final la última parte se ha hecho de rogar, lo siento, pero la gripe se ha alojado en mi casa y ha sido complicado echarla :) Hace dos semanas empezados a hablar de alimentación y del blw, ahora continuaremos explicando cómo hacer este método a grandes rasgos. Es importante que señalar que son recomendaciones basadas en las dictadas por la OMS.




Lo primero que hay que tener en cuenta es que la leche será el principal alimento del niño hasta el primer año de vida, ya sea artificial o materna. A partir de ahí hay que ofrecer una alimentación que responda a las necesidades del niño, darles de comer lenta y pacientemente, alentándolos a que coman, pero sin forzarlos, lo mejor es hablarles y mantener el contacto visual. Lo que mejor funciona es integrarlos en la comida familiar, hay que sentarse a comer todos juntos.

Es importante mantener una buena higiene y manipular los alimentos correctamente. Empezar a partir de los 6 meses con pequeñas cantidades de alimentos y aumentarlas gradualmente según quiera el bebito, debemos hacer de la misma manera con la consistencia y la variedad. Tenemos que ofrecer alimentos variados y ricos en nutrientes, basándonos siempre en las reglas de alimentación perceptiva, es igual de importante lo que el niño come, como cuándo y dónde lo hace, también es importante tener en cuenta quién lo alimenta.

Es fundamental decir que si el niño rechaza un alimento no se le debe obligar a comerlo, lo mejor es experimentar con diversas combinaciones, sabores y texturas, de hecho, si se le ofrece unos días después ese alimento seguramente se lo coma. Lo que ocurre es que la primera vez igual no le apetecía o le extrañaba el sabor. Lo ideal es minimizar las distracciones a la hora de comer para que no pierda interés y recordar siempre que los momentos de la comida son aprendizaje y amor. 


Lo que es esencial es darle a nuestro niño una alimentación que cubra sus necesidades nutricionales, claro que no siempre estamos seguros de cuál es un buen alimento complentario, pues a grandes rasgos sería: Aquél que es rico en energía, proteína y micronutrientes como el hierro, zinc, calcio, vitaminas, ... No debe ser ni picante ni salado, el niño lo debe comer con facilidad y debe ser de su gusto.

Lo mejor es que el niño coma lo mismo que el resto de la familia, siempre adaptado a sus capacidades, primero marchacadito y luego en trozos más grandes. El Baby Led Weaning no es sólo un método para aprender a comer, es un método de interacción social y familiar, por eso es tan efectivo y tan satisfactorio. 

¿Qué os parece? ¿Os animais a probarlo con vuestros pequeños? Desde aquí os avanzo que desde Little Doula en breve organizaremos talleres en los que aprenderemos mucho sobre el tema y lo pasaremos muy bien,  por si os interesa el tema y queréis asistir ;)


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